Maravillosa sesión de Reeko, que durante los últimos años está demostrando una personalidad abrumadora: ha encontrado un lenguaje propio extremadamente elegante y profundo, tanto mezclando como produciendo, un discurso tangente a las corrientes de moda en Alemania pero elaborado con una técnica personalísima y desbordante de carácter. Imprescindible: finura, gracia y mordiente.
Cremita de ingredientes sabrosos y cocción a temperatura exacta.
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